La reclamación médica puede tener lugar cuando se sufre un potencial error médico o negligencia por parte de la asistencia sanitaria. Las consecuencias van desde un agravamiento de la enfermedad, lesiones permanentes o incluso el fallecimiento.


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Qué son las reclamaciones médicas

Las reclamaciones médicas se definen como las demandas o protestas hacia la asistencia sanitaria correspondiente por motivo de haber sido víctima de un error o negligencia médica. La reclamación es definida como una petición que una persona plantea ante otra persona física, institución o comercio, con el objetivo de resolver un problema. Cualquier reclamación médica se realiza a fin de buscar una compensación por los daños y perjuicios causados. Cuando el paciente desea reclamar una intervención o servicio, es porque parte de la premisa de aquello que considera justo, defendiendo sus derechos como cliente.

Las reclamaciones médicas más comunes se producen por alguna de las siguientes razones:

  • Retrasos o errores en el diagnóstico o en su interpretación.
  • Prescripción inadecuada de medicamentos.
  • Demoras en atención de urgencia.
  • No dar la adecuada o suficiente información previa sobre la intervención.
  • Intervenciones quirúrgicas que ocasionan lesiones al paciente.
  • Infecciones hospitalarias.

Cómo fue la reclamación médica por el Talidoma.

Cuándo reclamar un problema médico

A raíz de los motivos mencionados en el anterior apartado, es lícito que el paciente desee interponer una reclamación médica. Para que una actuación del personal sanitario sea considerada negligente, se deben dar los siguientes elementos:

-        Daño físico o material en una persona.

-        La actuación negligente por parte del médico.

-        Que haya un nexo causal entre el daño y la actuación negligente.

En este sentido, los motivos objeto de reclamación se dividen en daños personales y daños materiales.

Daños personales

  • Lesiones permanentes. Son objeto de reclamación todas las lesiones, secuelas o agravios que hayan sido causados por el error médico sufrido.
  • Incapacidad temporal. Hace referencia al tiempo en el que se ha tardado en curar o estabilizar las lesiones provocadas por el error médico.
  • Daño moral. Angustia y aflicción padecidos por la víctima, así como por sus familiares.

Daños materiales

  • Daño emergente. Es el conjunto de gastos soportados por la persona afectada por el error médico, tanto presentes como futuros.
  • Lucro cesante. Situación de pérdida de capacidad económica de la persona afectada.

Plazo para reclamar negligencia médica

El plazo para interponer una reclamación médica depende de si la negligencia ha sido cometida en un centro sanitario público o privado.

A)    Si se produce en la sanidad pública, el plazo máximo para iniciar el procedimiento es de 1 año desde que tiene lugar la negligencia médica. En el caso de que se cause o agrave una lesión o enfermedad, el plazo empieza a contar desde la fecha en la que se cure dicha lesión o enfermedad, es decir, cuando se recibe el alta de las lesiones provocadas.

B)    Si se produce en la sanidad privada, el plazo máximo para iniciar el procedimiento es de 5 años, pudiendo ser de 1 año en el caso de responsabilidad extracontractual. En el caso de que se cause o agrave una lesión o enfermedad, el plazo empieza a contar desde la fecha en la que se cure dicha lesión o enfermedad, es decir, cuando se recibe el alta de las lesiones provocadas.

Cómo hacer una reclamación médica

El primer paso para elaborar una reclamación médica es acreditar la existencia de un error médico, para lo cual es preciso recopilar una serie de pruebas:

  1. Historial clínico del paciente e informe de alta médica.
  2. Informe pericial (enlazar con informe pericial) que sirva como nexo entre los daños provocados y la actuación negligente, así como una cuantificación del mismo.
  3. Testimonios de personas que sean conocedoras del acontecimiento: otros médicos, familiares o pacientes.
  4. Seguimiento fotográfico de la evolución de la lesión.

Llegados a este punto, es preciso distinguir de nuevo entre sanidad pública y sanidad privada a la hora de querer realizar la reclamación.

A)    Reclamar ante la sanidad pública. Interponer una reclamación por responsabilidad patrimonial ante la administración sanitaria pertinente. Es un procedimiento administrativo en el que se reclama una indemnización por los daños y perjuicios provocados por la administración sanitaria causante de la negligencia.

B)     Reclamar ante la sanidad privada. Interponer una demanda por responsabilidad civil ante la institución médica pertinente. Este procedimiento se sigue ante los Tribunales de justicia de la jurisdicción civil.

Tipos de reclamaciones médicas

Además de reclamar un error médico relativo a la acción del profesional, también se pueden interponer reclamaciones médicas por otros motivos.

1. Reclamación por negligencia médica

Una negligencia médica es un daño físico y/o moral producido al paciente como consecuencia de un proceder médico imprudente o realizado desde el desconocimiento. Es decir, es toda lesión causada al paciente por no haber obrado el personal sanitario como debió hacerlo. Es importante advertir que aquellos daños que no pudieran prevenirse o evitarse no pueden conllevar a negligencia médica. En este sentido, las negligencias están enfocadas al cómo se ha intervenido, más que al resultado de la intervención.

2. Reclamación por seguro médico

Una reclamación ante el seguro médico puede ser motivada por la negativa de la aseguradora a prestar un servicio, realizar cambios en el contrato o el impago de una indemnización. Es importante tener claro qué tipo de seguro se tiene contratado, así como las prestaciones y cláusulas que conlleva dicho contrato.

En este sentido, puede ocurrir que la aseguradora se niegue a realizar un servicio, bien porque no ha finalizado el período de carencia (en el cual se acuerda que no se cubrirán algunas prestaciones); por irregularidades en el cuestionario de salud (determinar una patología que no haya sido especificada en el cuestionario); o bien porque el cliente no esté al corriente de pago.

3. Reclamar alta médica

Puede ocurrir que un trabajador se encuentre de baja laboral, cuando el organismo pertinente emite un alta médica y el trabajador no considere en absoluto que esté capacitado para volver a su rutina laboral.

La disconformidad por alta médica (enlazar con disconformidad alta médica) es la falta de acuerdo entre el alta médica y la persona afectada o paciente, que suele ocurrir cuando la persona afectada considera que no está en condiciones para reincorporarse a su vida laboral, mientras que el alta médica emitido afirma lo contrario. Los motivos para presentar la reclamación son: estar imposibilitado para desempeñar el trabajo, estar recibiendo asistencia sanitaria o tener un carácter temporal de incapacidad.

4. Reclamar a la mutua

A través del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, los trabajadores disconformes con la atención sanitaria recibida por parte de una Mutua pueden trasladar sus reclamaciones a dicho organismo público, además de tener que cumplimentar la Hoja de Reclamaciones en la Mutua correspondiente. Las reclamaciones pueden ser presentadas mediante formularios disponibles en las ventanillas de cada una de las mutuas, desde los servicios de asesoramiento sindicales, o bien a través de la Oficina Virtual de Reclamaciones a Mutuas.

La importancia del perito médico ante reclamaciones médicas

Determinar y demostrar la existencia de un error o negligencia médica no siempre es sencillo. Gracias a los servicios del Perito Médico se puede ilustrar al Juez o Tribunal sobre el estado de la técnica sanitaria. Tras estudiar toda la documentación requerida para la reclamación, el perito médico elaborará el pertinente informe pericial, estableciendo el nexo entre el error médico y los daños causados al paciente. Será el informe pericial el que fundamenta la opinión del Juez o Tribunal en el procedimiento.