Un análisis clínico o prueba de laboratorio es un tipo de examen confirmatorio que solicita un profesional sanitario para confirmar o descartar un posible diagnóstico. Esto puede verse motivo ante la presentación de sintomatología como es fiebre, dolor de cabeza...

Este tipo de diagnóstico se apoya en el estudio de diversas muestras biológicas mediante su análisis en el laboratorio y proporciona un resultado con un valor cuantitativo, nativo o negativo que indica si hay algún tipo de patología en el paciente al que se le asigna la muestra.

El Perito en Análisis Clínicos

Existen muchas formas de ayudar al diagnóstico de las enfermedades, una de ellas es el análisis clínico de las muestras biológicas del paciente, que se pueden extraer a través de la orina, la saliva, la sangre, etc. En la actualidad, el análisis clínico de este tipo de muestras se utiliza con frecuencia para diagnosticar cualquier tipo de enfermedad. A través de una muestra de orina, por ejemplo, podemos detectar si el paciente tiene un exceso de bilirrubina y diagnosticar tiempo algún tipo de enfermedad hepática que puede suponer un problema muy grave.

Este tipo de diagnóstico, así como el seguimiento de la salud de los pacientes con patologías clínicas requiere el estudio de estas muestras. El perito analista clínico es el experto en realizar esta actividad y es capaz de determinar si ha habido algún tipo de error durante el procedimiento del análisis clínico.

Gracias a su formación y experiencia un perito experto en análisis clínicos es capaz de prestar sus servicios en muchos ámbitos:

  • Cuando se produzcan negligencias médicas como consecuencia del mal análisis clínico de una muestra.
  • Cuando por esta causa se produzcan secuelas traumatológicas y/o psiquiátricas
  • Cuando se produzcan incapacidades temporales, invalidez o minusvalía como consecuencia de algún tratamiento a causa de un mal análisis clínico.
  • En caso de que un órgano judicial requiera un informe médico pericial en materia de análisis clínicos.

Quién es el Perito en Análisis Clínico

Para ser perito en análisis clínicos es importante contar con una formación previa. El grado superior en técnico de laboratorio clínico y biomédico autobús que la formación necesaria para poder valorar este tipo de análisis y realizar cualquier labor de peritaje en este campo.

Existen otras vías para llegar a ser perito en análisis clínicos pero suponen gastos grandes en cursos de formación privada o el estudio de carreras universitarias cómo química, y su posterior especialización en química clínica, y medicina, la cual supone una vía mucho más larga para acceder al peritaje de este tipo de profesión.

Además de este tipo de formación, será necesario que el perito en análisis clínicos cuente con un conocimiento amplio del ámbito judicial, ya que le permitirá realizar su trabajo de la manera más eficiente posible, aconsejando cuál es la mejor opción para cada cliente en cada caso. Al mismo tiempo, será clave que este profesional sea capaz de elaborar un informe pericial riguroso de forma clara y adecuada.