Los delitos telemáticos son cada vez más sonados y frecuentes, en tanto en cuanto aumenta nuestra confianza depositar nuestros datos personales, propiedades e información valiosa en los servicios y aplicaciones informáticas. En este sentido, proliferan los tipos de delitos telemáticos, así como las formas de combatirlos.
Qué son los delitos telemáticos
Los delitos telemáticos son los crímenes cometidos en el campo de la telemática. La telemática es la disciplina científica y tecnológica que analiza los servicios y las aplicaciones que usan los sistemas informáticos y los de telecomunicación de forma conjunta. La telemática engloba el estudio y gestión de las redes y servicios de comunicaciones, por ejemplo, cualquier tipo de comunicación a través de internet o los sistemas de posicionamiento global.
Con la globalización y digitalización de la sociedad actual, los delitos telemáticos a través de internet se han incrementado con el paso de los últimos años. La estafa, la corrupción de menores, la revelación de secretos, amenazas y coacciones, calumnias, ciberacosos o falsificaciones son algunas de los numerosos delitos que se pueden cometer a través de los medios de comunicación, especialmente, a través de internet.
Tipos de delitos telemáticos
Los delitos telemáticos se clasifican en cuatro grupos, según el Convenio de Ciberdelincuencia del Consejo de Europa:
1. Fraude informático
Son los delitos telemáticos o informáticos que incluyen la falsificación informática mediante la introducción, borrado o supresión de datos informáticos. En su mayoría incluyen el manejo ilegal de los sistemas de información, bien mediante la creación de usuarios inexistentes para recibir dinero, la creación de cuentas bancarias adicionales no autorizadas, introducción de algoritmos matemáticos que perjudiquen el funcionamiento normal de un sistema o la intervención directa en los procesos automáticos del dispositivo.
2. Amenazas y coacciones
Delitos telemáticos que atentan directamente contra la capacidad de libertad de la víctima. Las amenazas son cada vez más frecuentes por internet a través de medios escritos, vídeos y audios, en los cuales se comunica un mal ilícito contra su persona o su propiedad. En las coacciones el delincuente utiliza la violencia para obligar o impedir a la víctima a hacer algo. En definitiva, las amenazas afectan al pensamiento del individuo y las coacciones afectan a los actos.
3. Inferencia de datos
Son delitos telemáticos que atentan contra la confidencialidad, integridad y disponibilidad de los datos y sistemas informáticos. Incluye el acceso ilícito a sistemas informáticos, la intercepción ilegal de datos, la interferencia en el funcionamiento de un sistema informático y el abuso de dispositivos que contribuyan a la realización de los anteriores crímenes.
4. Revelación de secretos
Son los delitos telemáticos que hacen referencia a la difusión o filtración de información de una persona que no desea que dicha información sea difundida públicamente, atentando contra la intimidad del mismo. Entendiendo como secreto aquella información relativa al ámbito íntimo que sólo es conocida por la persona y aquellos que considere oportunos. En este sentido, el delincuente utiliza datos personales que están ubicados en soportes electrónicos, informáticos o telemáticos, a fin de causar daños al propietario de la información.
El perito y la delincuencia online
La importancia del Perito Informático es vital, pues éste realizará un análisis sobre la evidencia informática, con el objetivo de emitir un dictamen profesional sobre las cuestiones planteadas por la persona afectada. El desempeño del perito es imprescindible para aportar las pruebas informáticas necesarias de cara a un procedimiento judicial. El dictamen pericial puede usarse en distintas situaciones:
- Autentificar cualquier tipo de prueba informática, por ejemplo, un correo electrónico
- Defensa por una acusación de delito informático
- Cadena de custodia y análisis forense de ordenadores en procesos judiciales
- En suplantaciones de identidad en redes sociales u otros soportes de internet
Dónde denunciar el delito telemático
Para denunciar cualquier delito telemático o informático, especialmente los relacionados con el correo electrónico, SMS, WhatsApp y demás plataformas de comunicación, se debe acceder al portal del Grupo de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil.
1. Grupo de Delitos Telemáticos
El Grupo de Delitos Telemáticos (GDT) fue fundado con el objetivo de investigar, dentro de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, aquellos delitos que se cometen a través de internet y otros medios telemáticos. A su vez, los Equipos de Investigación Tecnológica (EDITE) se encuentran en las Unidades Orgánicas de Policía Judicial de la Guardia Civil desplegadas por provincias. Sus funciones son las siguientes:
- Realizar investigaciones relacionadas con la delincuencia informática y los fraudes telemáticos, motivado por iniciativa propia, a petición de las Autoridades Judiciales o por denuncia de una persona
- Detectar delitos informáticos en la red
- Apoyar y contribuir las investigaciones del resto de las Unidades de la Guardia Civil
2. Policía Nacional y Guardia Civil
A través de la página web de la Dirección General de la Policía los ciudadanos se pueden poner en contacto con las Unidades especializadas del Cuerpo Nacional de Policía para comunicar situaciones presuntamente delictivas, también en el área telemática: pornografía infantil, redes sociales, amenazas y extorsiones,, fraudes en internet, seguridad lógica, piratería, y demás fraudes telemáticos. En cuanto a la Guardia Civil, el Grupo de Delitos Telemáticos es la Unidad encargada de dichas investigaciones se encuentra en el siguiente enlace.
Cómo reclamar un delito telemático
Ante un delito telemático, el ciudadano debe saber cómo denunciarlo y reportar el fraude a las autoridades pertinentes. El primer paso sería contactar con el servicio o empresa implicada. A veces, basta con comunicar el problema al servicio competente del lugar desde donde se está produciendo el delito (institución, comercio o empresa) accediendo a sus secciones de ayuda desde donde poder denunciar el delito telemático.
Si el problema no se puede solucionar mediante estos servicios, la opción más competente es interponer una denuncia ante las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado: el Grupo de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil y la Brigada de Investigación Tecnológica (UIT) de la Policía Nacional, o los demás Cuerpos propios de Comunidades Autónomas como la Ertzaintza, los Mossos d´Esquadra o la Policía Foral de Navarra.
Cómo defenderse de un delito telemático
Con la misión de reducir al máximo la posibilidad ser víctima de un delito telemático, enumeramos las siguientes recomendaciones:
- Cambiar de contraseña de forma periódica, haciéndolas más complicadas. Evitar tener la misma contraseña en todas las cuentas
- Cerrar sesión en todas las cuentas al terminar, especialmente si se comparte el dispositivo electrónico
- Disponer de un antivirus para prevenir ataques informáticos
- Emplear un firewall o cortafuegos para tener un acceso fiable a internet
- Realizar copias de seguridad de forma continuada
- Desconectar el internet cuando no esté siendo utilizado
- La autorización de las personas adecuadas a los dispositivos, información o contraseñas personales