La Declaración Universal de los Derechos del Niño de la ONU establece el maltrato a los niños como un problema social y de salud pública que, además, es un delito castigado por la ley.

En España, más del 25% de los niños y niñas sufren algún tipo de maltrato o violencia por parte de sus padres, madres o cuidadores. Cuando esto ocurre, solo el 10% llega a denunciarse.

Te explicamos toda la información que necesitas saber para identificar el maltrato infantil y qué puedes hacer para acabar con esta lacra.

Qué es el Maltrato Infantil

A pesar de que no existe una definición precisa acerca de lo que es y no es maltrato infantil, se entiende como maltrato infantil toda clase de acciones o hechos que perjudican el correcto desarrollo físico, cognitivo y emocional de los menores, ya sean producidas por adultos, instituciones o la sociedad.

Cuándo se produce el Maltrato Infantil

El maltrato infantil se produce cuando existe una serie de factores que evidencian un modelo de actuación, es decir, cuando se realizan una serie de acciones que encajan dentro de unos patrones que se repiten.

Normalmente, estos maltratos infantiles presentan diferentes indicadores que demuestran la posibilidad de un episodio de abuso infantil. Las señales pueden ser tanto físicos como psicológicos o conductuales en el menor, así como en el maltratador.

La violencia intrafamiliar puede desencadenar un progresivo aumento del maltrato, no solo teniendo como víctima de los actos al menor, sino que posteriormente el menor puede convertirse en maltratador debido a las constantes exposiciones a estos hábitos violentos.

Numerosos estudios señalan que el maltrato continúa de forma generacional y que los niños maltratados poseen alto riesgo de perpetuar estos comportamientos en la etapa adulta.

Qué tipos de Maltrato Infantil se pueden reclamar

Dependiendo de los actos que se ejerzan sobre los niños, podemos reclamar diferentes tipos de maltrato infantil:

Maltrato Físico

Este tipo de maltrato se caracteriza por el uso de la fuerza de forma excesiva e inadecuada. En resumen, son todas aquellas acciones no casuales provocadas por adultos y que crean un daño físico en el menor.

Los principales indicios de este tipo de maltrato son:

  • Arañazos
  • Hematomas
  • Quemaduras
  • Mordeduras
  • Zarandeos
  • Todo tipo de lesiones que se exterioricen físicamente en el cuerpo del niño

Síndrome de Münchausen por poderes.

En este grupo hay que destacar el Síndrome de Münchausen por poderes. Este tipo de violencia se ejerce mediante el abuso de poder los progenitores. Consiste en inventar los síntomas de una patología en el niño o la creación de determinados síntomas a través del suministro de sustancias o medicamentos sin prescripción médica, con el objetivo de que parezca que el menor está enfermo.

Habitualmente, los signos de este síndrome, de causas desconocidas, solo aparecen durante la presencia de la madre ya que suele ser quien agrava y perpetra el abuso. En ocasiones, los exámenes complementarios no aclaran su diagnóstico.

A largo plazo, puede dejar huella en el niño: desórdenes psicológicos y emocionales y fuertes cambios conductuales en la etapa infantil y adolescente.

La explotación laboral, la mendicidad, o el tráfico de órganos también se engloban como un tipo de maltrato físico.

Abuso o Violencia Sexual

Son aquellas relaciones sexuales que se mantienen con un menor no preparado evolutivamente para ello y sin consentimiento, por lo que se produce un abuso de autoridad y poder sobre la víctima, así como un intenso sometimiento hacia el menor.

Las principales formas de abuso sexual son:

  • Violación
  • Explotación sexual
  • Incesto
  • Vejación

Este tipo de maltrato es uno de los más difíciles de detectar y estudiar, ya que también implica los actos sin autorización por parte de un adulto que no conllevan contacto físico. Estos serían:

  • Masturbación o realización del acto sexual en presencia de un niño
  • Seducción verbal explícita
  • Exhibición de los órganos sexuales a un niño
  • Matrimonio forzado

En la mayoría de las ocasiones es un varón el que realiza este tipo de maltrato hacia el niño, ya sea el padre, padrastro, un familiar cercano, el compañero sentimental de la madre o alguien cercano a la familia.

Maltrato Psicológico Infantil

En este tipo de maltrato están comprendidos todos aquellos actos, conductas o manifestaciones continuadas que amenazan y deterioran el desarrollo psicológico de los niños.

Existen diferentes tipos de maltrato psicológico infantil. Las formas más comunes de abuso emocional son:

  • Insultos, rechazos, humillaciones, amenazas y toda clase de expresiones que minan las actitudes del menor
  • También se incluyen comportamientos que denotan manipulación, confinamiento, intimidaciones…

Es tipo de abuso se conoce como el maltrato silencioso ya que las marcas no pueden identificarse a simple vista como en el caso del maltrato físico. En la mayoría de los casos, suelen ser los padres o algún familiar cercano.

Es uno de los más frecuentes y las consecuencias psicológicas del maltrato infantil pueden provocar grandes problemas en el desarrollo de los niños.

Negligencia Infantil o Abandono

Debido a su importancia o se enmarca en el maltrato físico ni psicológico, por lo que es una tipología independiente.

Sin embargo, la negligencia infantil se define como la falta de responsabilidad parental en la que se incumplen las obligaciones de los progenitores, familiares o convivientes. En este tipo de maltrato los cuidadores omiten las necesidades básicas de supervivencia de los menores durante un período corto o permanente.

Comprende las necesidades físicas y psicológicas del menor. Algunos ejemplos de este tipo pueden ser:

  • Privación de alimentos o vestimenta
  • Escasa vigilancia
  • Descuidos de higiene
  • Obstaculización en tratamientos médicos
  • Negación del derecho a la educación
  • Etc.

Maltrato Prenatal

Consiste en el maltrato que se realiza intencionadamente hacia el feto. Incluye aquellas acciones de la vida de la madre que repercuten de manera negativa y patológica en el embarazo y, consecuentemente, en el parto.

Entre las principales manifestaciones de este maltrato encontramos:

  • Falta de control médico
  • Negligencias en la alimentación o higiene durante el embarazo
  • Medicaciones o sustancias no prescritas
  • Consumición de alcohol y drogas
  • Excesivo consumo de tabaco
  • Exposición a radiaciones
  • Actividades perniciosas para el feto

Maltrato Institucional

Este maltrato se produce cuando la legislación, programas o procedimientos vigentes vulneran los derechos fundamentales de los menores con o sin contacto directo con el menor. Este tipo de maltrato procede de los profesionales que ejercen poderes públicos o privados, ya sea por acción o por omisión, que están apoyados por una institución.

Cómo Denunciar el Maltrato Infantil

Como ciudadanos tenemos la obligación de actuar ante una situación de maltrato que tiene como víctima a un menor.

Es necesario denunciar el maltrato infantil y notificar de estos actos a los organismos competentes de la protección de infancia: servicios sociales, fuerzas de seguridad del Estado y servicios especializados en protección de menores.

Las denuncias pueden interponerse tanto por maltrato infantil físico como psicológico. Para ello es necesario:

  • Un abogado especialista en defensa del menor
  • Un Informe Pericial, elaborado por un perito especializado, donde se recogen las conclusiones pertinentes que ayudarán a la obtención de una sentencia firme por parte de un juez.

Informe Pericial sobre las Consecuencias del Maltrato en el Menor

Ejercer un tipo de maltrato en los niños, intencionado o no, puede desencadenar diferentes secuelas en sus víctimas. No solo entendemos como daños las propias agresiones que surgen del maltrato físico o sexual, sino que en el Informe Pericial sobre maltrato infantil se pueden incluir otros trastornos esporádicos que podrían llegar a convertirse en crónicos.

Estos trastornos dan lugar a alteraciones conductuales, cambios emocionales y conflictos sociales. El perito psicólogo evaluará la severidad de las hechos. El grado depende de varios factores:

  • Intensidad y frecuencia del maltrato
  • Relación del agresor con el menor
  • Características particulares y personalidad del niño: edad, sexo, susceptibilidad, capacidades sociales, carácter, etc.
  • El uso de la violencia física
  • Apoyo familiar hacia la víctima
  • Acceso a servicios médicos, psicológicos y sociales

Informe Pericial de Maltrato Infantil en Etapa Temprana

Durante los primeros períodos evolutivos del menor, entre 0 y 5 años, se observan numerosos efectos negativos en las habilidades sociales, capacidades relacionales de apego y en la autoestima. Estas consecuencias, en las víctimas más pequeñas, se reflejan en:

  • Alteraciones en la alimentación y en los hábitos de comida
  • Pesadillas y problemas de sueño
  • Deficiencias psicomotoras: descoordinación del movimiento del cuerpo, problemas posturales o de desplazamiento
  • Trastornos psicosomáticos. El estado mental de un individuo afecta a su condición física. Algunas condiciones físicas pueden agravarse debido al estrés o ansiedad que ocasionan los episodios de maltrato.
  • Pérdidas de control físicas y psíquicas

Estos problemas pueden desencadenar en asuntos más graves como anomalías neurológicas, nerviosas o enfermedades mentales adquiridas.

Informe Pericial de Maltrato Infantil en Etapa Escolar y Adolescente

En víctimas con más edad (escolares y adolescentes), además de las ya comentadas anteriormente, pueden darse otras conductas:

  • Autolesiones
  • Huida del hogar
  • Aislamiento
  • Agresividad verbal o física
  • Miedo generalizado
  • Hiperactividad
  • Disminución del rendimiento académico o fracaso escolar
  • Deficiencia intelectual
  • Rechazo propio
  • Descuido físico
  • Culpabilidad y vergüenza
  • Trastorno de identidad
  • Mal comportamiento y delincuencia
  • Depresión o ansiedad
  • Problemas sociales y relacionales
  • Bullying o acoso
  • Complacencia excesiva por parte del menor hacia los adultos

Asimismo, cualquier tipo de agresión entre cónyuges también la sufren directamente los menores física o psicológicamente.

Estos efectos también pueden darse en víctimas de maltrato infantil en la edad adulta.

Diagnóstico, Tratamiento y Prevención del Maltrato a los Niños

Diagnóstico y Tratamiento del Maltrato Infantil

El encargado de diagnosticar y tratar el maltrato infantil es el perito psicólogo. Esto es un psicólogo especializado en protección infantil que, a través de diferentes procesos, evaluará los síntomas con el fin de reconocer riesgos o causas de violencia en el niño.

El perito psicólogo trabaja junto con otros profesionales para determinar un diagnostico específico e iniciar un tratamiento acorde con los síntomas presentados por el menor.

En Perito Judicial Group contamos con psicólogos especializados en la protección del menor que analizarán los hechos y elaborarán un Informe Psicológico que pruebe el maltrato del menor.

Cómo Prevenir el Maltrato Infantil

Para evitar el maltrato infantil es necesario contar con profesionales de la salud y la psicología. Los pediatras, los psicólogos y los psiquiatras poseen una posición para detectar situaciones de riesgo en menores. También los maestros y educadores tienen un papel fundamental en la prevención y diagnóstico del maltrato.

La prevención del maltrato se organiza en TRES NIVELES:

1. Prevención primaria

Esta prevención está dirigida a la población en general con el fin de evitar los factores de riesgo que puedan producir actividad de maltrato infantil. Para ello se llevan a cabo diferentes dinámicas:

  • Sensibilización y formación de profesionales
  • Promover valores de afecto hacia la infancia, la mujer y la paternidad
  • Prevenir embarazos no deseados, especialmente en mujeres jóvenes
  • Evaluación de factores de riesgo en niños sanos
  • Peritar la calidad de los vínculos afectivos con los padres
  • Ofrecer alternativas en los castigos conductuales
  • Reforzar la autoestima de los padres

2. Prevención secundaria

Se propone a la población de riesgo con la finalidad de realizar un diagnóstico temprano de maltrato infantil e implantar un tratamiento específico.

Para ello, es necesario reconocer los diferentes episodios de maltrato o violencia infantil para establecer estrategias de tratamiento especializadas y remitir a centros de salud mental tanto a víctimas como a los maltratadores, especialmente cuando se trata de los padres.

3. Prevención terciaria

Consiste en la rehabilitación del maltrato, ya sea enfocado a menores (víctima) o a los maltratadores. Es muy importante contar con un amplio equipo multidisciplinar: pediatras, psicólogos, trabajadores sociales, terapeutas familiares, jueces de menores, cuerpos policiales, etc.

Prevención de maltrato infantil por parte de los padres

Los padres tienen un papel fundamental en la prevención del maltrato infantil y futuras alteraciones en la conducta del menor.

Lo primero y más importante es tomar conciencia de nuestros actos. Toda conducta puede ocasionar un efecto negativo en nuestros hijos.

Lo segundo es hacer uso de la empatía. Hay que pensar cómo se puede sentir un niño pequeño frente a una determinada actuación.

Por último, buscar ayuda. Existen numerosos cursos de acción para prevenir el desarrollo del maltrato infantil, así como grupos de apoyo para padres para descargar frustraciones.

Para los adultos víctimas de maltrato cuando eran menores existe asesoramiento especifico por parte de psicólogos y médicos para que no exterioricen ni continúen con el proceso de maltrato. Los profesionales de la salud ayudarán a lidiar con los miedos, inquietudes y traumas como padre o madre.

Póngase en contacto con nosotros si cree que algún menor cercano está sufriendo maltrato infantil y quiere denunciar. Nuestro perito psicólogo le realizará un presupuesto sin compromiso.